sábado, 7 de enero de 2012

No me digas que no, porque sí! Así morían los soplones

La suerte que espera a todo soplón e infiltrado:
"¡Así mueren los malditos soplones y infiltrados que entregan a los mejores hijos de nuestro pueblo! ¡La guerra popular es invencible! ¡Viva el Presidente Gonzalo! PCP"
(Aniquilamiento selectivo de un soplón, Canto Grande, Lima, 1995)
Foto y pie de foto extraídos de la página web solrojo.org (visita del 06.01.12 – 19:46)


NO AL TERRORISMO 
Desde lo vivido

Hace poco una gentil amiga me sugirió escribir una entrada de blog que tratara sobre el terrorismo, al principio sentí reparo por ser un tema complicado, y sobre el que además no tenía mayor información que la proporcionada por la memoria. Posteriormente ofreció colaborar con información que pudiera ayudarme a formar ideas más sólidas; finalmente, hoy al leer mi TL (sí, siempre en twitter) tanta condescendencia con el terrorismo, y teniendo el apoyo de tan grande intelectualidad –la de mi amiga- decidí emprender el escrito. 

De niño viví en Ate, en la casa que un tío muy amablemente proporcionó a mi familia. Una zona bastante pobre por esas épocas, y aun hoy en algunas partes del distrito. La casa estaba a medio construir -lo cual en general era bastante común-, no estaba tarrajeada, el techo era de “Eternit” y tenía columnas que no habían sido rellenadas. Dado el estilo travieso de todo niño gustaba de trepar en esas columnas, cual Hombre Araña por los grandes edificios. Estaba un día trepado, mirando al horizonte –no había casa que tuviera más de un piso, ustedes me entienden-, la hora era cercana a las 6 de la tarde, cuando en uno de los cerros a unos mil quinientos metros de distancia vi una gran luz amarilla, un segundo después -que en realidad recuerdo como transcurridos varios minutos- me encontraba tirado en el piso falso de la casa, con los oídos tapados y sin saber que había pasado. 

Mi padre murió cuando tenía ocho años, vivía él en casa de mi tío. Fuimos un día –con una hermana mayor- a visitarlo. La única comparación que puedo hacer en relación al viaje que realizábamos de Ate a Los Olivos, donde vivía mi padre, es con la de los documentales “Sobreviví” del Discovery Chanel. Recuerdo aquél día ir en un bus –el Covida- cuya ruta pasaba por la vía de Evitamiento, la situación económica era bastante mala, hoy considero que no sólo por malos manejos políticos, fiscales o monetarios, sino que postulo que en gran medida gracias al terrorismo, de pronto vi un cadáver frente a la única fundición que he visto en mi vida en mi querido país y que hasta hoy existe en la vía de Evitamiento, no era la primera vez que veía uno, pero si la primera que me atreví a preguntar el por qué siempre habían cuerpos que parecían una fina lámina de papel tirados en esta vía –arrollados una y otra vez por los pocos autos, buses y camiones que pasaban por ahí-. Rápidamente me respondió a la oreja y muy bajito, no preguntes, quédate callado, no mires a nadie fijamente, ni siquiera voltees la mirada, hazte el dormido. No entendí el por qué, pero hice caso. Posteriormente me explicó que podía ser por dos motivos el primero porque la situación era tan mala que se hacían atropellar para que el dueño del vehículo mantenga a su familia; la segunda, que además era la más probable, porque algún terrorista lo había matado y tirado en ese lugar. Por lo tanto era simplemente mejor no preguntar en público. 

Tuve buena suerte, nunca me pasó nada, pero sí le pasó a personas como la de la foto al inicio de este escrito, pueden decir que es una foto de archivo. Pues no, ni siquiera eso, fue extraída de una página web que hace apología abierta al terrorismo y a Abimael Guzman, no hace veinte años, hoy. ¿No les da escalofríos saber esto?. ¿La CIDH o alguna de esas ONGs sinvergüenzas defendió la vida de alguno de estos “soplones”? Por obvias razones prefiero no entrar más en ese detalle. A buen entendedor. 

Volviendo a lo de mi padre. El día que fuimos a visitarlo encontramos su cadáver, acababa de fallecer, había estado llenando agua y le dio un infarto, lo encontramos tirado en la cocina con la tina aun a medio llenar. Luego de fallecer, fue enterrado en un cementerio municipal. No teníamos dinero así que no teníamos otra opción. No recuerdo bien el pabellón en el que se encontraba, pero recuerdo claramente que el del costado –y varios más- había sido tomado por el PCP y el MRTA, los nichos estaban todos pintados de color rojo con la hoz y el martillo. Era sumamente difícil ir al campo santo, pues era muy probable encontrar algún despreciable terrorista visitando a alguno de sus camaradas. Producto de ello prácticamente no íbamos a visitar a mi padre, como tradicionalmente se haría, ello poco me importaba pues no había vivido con mi padre y no tenía sentimientos profundamente desarrollados hacia él. Sin embargo, recuerdo que me entraba la ira más profunda, desesperación incontrolable e impotencia sin igual al ver triste a mi madre –muy católica ella, fiel a sus principios, y sobre cualquier cosa con un cariño muy grande hacia mi padre- por no poder ir a dejar un simple ramo de flores al cementerio. 

Seguramente muchos de ustedes deben tener historias mucho más profundas que la mía, mucho más dolorosas o chocantes. Pero mi único objetivo era preguntar ¿fue justa esa realidad? ¿fue justo que un niño pasara por ello? ¿fue justo que una madre no pudiera acompañar unos minutos a quien en vida fuera su esposo? ¿fue justo que hubiera gente muerta en la carretera? ¿fue justo lo que les pasó a ustedes?. No sé cómo pueda haber gente que diga que sí, que lo fue; y si dicen que no, que argumenten que nada de esto es justificación para que los terroristas estén presos o para que hayan sido ejecutados. Es verdad, no hay nada que haga legítimo el privar de la vida de una persona. ¿Pero no hay acaso diferencia entre lo legítimo y lo legal?. 


Nicho de dos terroristas en el que aún se puede apreciar -en el fondo- la hoz y el martillo 
Fallecidos en los años 1987 -1995




Vista de uno de los pabellones en los que se puede apreciar los "nichos rojos" en medio del lugar de descanso de civiles que nada tienen que ver con el terrorismo 



NO AL TERRORISMO 
Desde lo que viven nuestros héroes

La amiga de la que hablaba al principio me alcanzó información muy rica, la misma que me comentó había sido alcanzada desde la producción del programa de Rey con Barba, muy buen programa para mi gusto. Con ello puso en mi pensamiento el nombre de la señora María Elena Loayza Tamayo. En relación a su caso el Tribunal Constitucional da como hecho probado que [sic]:

… fue procesada, junto con otros imputados, por el delito de traición a la patria a cargo del fuero militar…[posteriormente] el 10 de octubre de 1994 el Tribunal Especial sin rostro del fuero común la condena a 20 años de pena privativa de la libertad y el 6 de octubre de 1995 la Corte Suprema de Justicia confirmó la sentencia”. 

Una primera cuestión que llama la atención es la forma en que el Tribunal Constitucional expone en su página web el caso de la mencionada. Primero dice [sic]:

“El 6 de febrero de 1993 la señora María Elena Loayza Tamayo fue detenida por miembros de la DINCOTE, cuando en el Departamento de Lima y en la Provincia Constitucional del Callao, se encontraba en estado de emergencia y suspendidas las garantías contempladas en los incisos 7,9,10,20.g) del articulo 2º de la Constitución peruana”. 

Lo que además de tener mala redacción y faltas ortográficas, da a entender -de buenas a primeras- un cierto direccionamiento al introducir el tema. ¿Para qué mencionar el estado de emergencia y la suspensión de garantías constitucionales? ¿No se debe ser imparcial? ¿La deontología jurídica no debería simplemente decir cómo, por qué y en qué situación se dieron los hechos? Y no poner el aderezo que da a entender que se detenía a una persona sin garantías constitucionales. ¿alguno de ustedes tenía garantizados sus derechos constitucionales entre 1980 y 1998?. Yo creo que no, al menos yo no. Una segunda cuestión que leí y me parece muy alarmante es [sic]: 

“La víctima se encuentra privada de su libertad en forma interrumpida desde el 6 de febrero de 1993 hasta la fecha, encarcelada en el Pabellón "C" del Centro Penitenciario de máxima seguridad de mujeres de Chorrillos, donde se le puso en una celda muy reducida, sin ventilación ni luz natural, con media hora de sol al día, con aislamiento celular continuo y con un régimen de visitas sumamente restringidas, incluso para sus hijos.”

 ¿Una condenada por hechos probados en dos instituciones distintas -el Tribunal Especial sin rostro del fuero común y la Corte Suprema de Justicia- debe ser tratada de víctima?. O sea, los terroristas destruyeron nuestra economía, malograron nuestra infancia, retrasaron nuestros estudios, nos quitaron familiares, nos tenían presos a partir de las 8 de la noche, nos privaron de años de desarrollo de nuestro país y su cultura, entre innumerables cosas más ¿y deben ser tratados como víctimas? No pues, así no es. 

Ahora bien, citando parte de la información que me fue alcanzada: “cuando se llevó el caso Loayza Tamayo al Sistema Interamericano de Defensa de los Derechos Humanos, en esta instancia tanto la Corte IDH como la Comisión IDH consideraron nulo el fallo de la Corte Suprema, argumentando que si bien el proceso penal seguido contra Loayza Tamayo en la justicia militar es nulo, la “absolución” que le brindó el juez militar sí es válida. En consecuencia, Loayza Tamayo no debió ser juzgada nuevamente por la Corte Suprema pues ello vulneró el principio de non bis in idem o prohibición de doble juzgamiento. (Cfr. Corte IDH - Caso Loayza Tamayo Vs. Perú, FJ. 66 a 77)”. En otras palabras las CIDH´s toman para su “víctima” lo que a esta le conviene y descarta lo que perjudica. ¿Tratan así también a los que nos dieron paz? Citando nuevamente: 

“La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha considerado nulo el sobreseimiento dictado en el fuero militar a favor de los comandos Chavín de Huántar, por la supuesta ejecución extrajudicial de 3 terroristas del MRTA. La CIDH señala que dichos comandos deben ser juzgados nuevamente en el Poder Judicial, porque tales hechos constituyen delitos comunes y no delitos militares.” 

Entonces queda preguntar. ¿Por qué la CIDH da validez a la absolución de Loayza e invalida la absolución de nuestros héroes? ¿Dónde quedo el principio de igualdad? Me queda preguntar también ¿qué es una ejecución extrajudicial? Busqué en el diccionario jurídico del Poder Judicial y encontré lo siguiente: 

-Ejecución:

Def. 1: (Derecho procesal) Dar cumplimiento a lo dispuesto por la autoridad jurisdiccional en el ejercicio de sus funciones. Por lo general se refiere a la sentencia. Aplicación de la pena de muerte. 


- Extrajudicial: 
Def. 1: Los actos, arreglos y transacciones que se hacen sin intervención de la autoridad jurisdiccional. Las partes en litigio lo usan para evitar un proceso que consideran engorroso o innecesario. 

En otras palabras, para este caso se entendería que es aplicar la pena de muerte sin intervención de la autoridad jurisdiccional. ¿Fue eso lo que hicieron los comandos Chavín de Huantar? ¿realmente estaban fuera de la Ley? ¿no es acaso su función la de defender el orden interno según el artículo 165 de La Constitución?. Ah cierto, estoy seguro que alguien saldrá diciendo que no soy abogado, así que remitiré a lo que dice la Oficina Del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Las Naciones Unidas (¿Un poco pomposo el nombre, no?). Ellos dicen: 

Hay ejecución extrajudicial cuando individuos cuya actuación compromete la responsabilidad internacional del Estado matan a una persona en acto que presenta los rasgos característicos de una privación ilegítima de la vida. Por lo tanto, para que con rigor pueda hablarse de este crimen internacional la muerte de la víctima ha de ser deliberada e injustificada. La ejecución extrajudicial debe distinguirse, pues, de los homicidios cometidos por servidores públicos que mataron: 

  • Por imprudencia, impericia, negligencia o violación del reglamento. 
  • En legítima defensa. 
  • En combate dentro de un conflicto armado. 
  • Al hacer uso racional, necesario y proporcionado de la fuerza como encargados de hacer cumplir la Ley. 


Nuevamente se habla de la víctima. Sería víctima la persona fallecida si esta hubiera muerto por el simple hecho de aparecer fortuitamente en fuego cruzado, pero no si en pleno uso de sus capacidades va y toma una embajada y de rehenes a los que se encontraban al interior de esta. 

Pero vamos por partes, como dijo Jack el Destripador (#okno). ¿la muerte de las 3 supuestas víctimas terroristas fue deliberada o injustificada?. La RAE define, deliberado: Voluntario, intencionado, hecho a propósito. De haber habido matanzas, ¿estás realmente fueron a propósito, voluntarias o intencionadas?. No lo creo, ¿y tampoco hay forma de probar lo contrario o sí?. ¿Y la presunción de inocencia?. Además, no fue en legítima defensa, o si uno fuera militar entraría en medio un operativo y preguntaría: señor terrorista, ¿usted me va a matar? ¿no es que el sólo hecho de entrar a un lugar de terroristas no constituye algo de lo que hay que defenderse?. ¿No era acaso un conflicto armado? ¿No estaban los comandos Chavín de Huantar encargados de hacer cumplir las leyes, de usar racional, necesaria y proporcionadamente las armas? Muchos podrían agarrarse de esto y decir, no, no fue proporcionado porque los comandos eran más, ¿tienen forma de probarlo ex ante? ¿se van a contar y decir, bueno los terroristas tienen 20 fusiles, y nosotros 30, dejemos los 10 fusiles que nos sobran?. Por favor, que no sean ridículos quienes defienden a los terroristas. Citando nuevamente:
“es preciso resaltar que el caso Chavín de Huántar se distingue favorablemente del caso Loayza Tamayo en 2 puntos centrales: 1) Los comandos Chavín de Huántar sí fueron absueltos por el Fuero Militar. En cambio, este Fuero se inhibió de juzgar a Loayza Tamayo, pero la Corte IDH y la Comisión IDH interpretaron esta “inhibición” como “absolución”. 2) La Corte Suprema decidió que los comandos Chavín de Huántar sean juzgados por la jurisdicción militar. En contraste, la Corte Suprema condenó a 20 años de prisión a Loayza Tamayo por el delito de terrorismo”.

Es decir, las CIDH´s convenidamente interpretaron la inhibición, el silencio, como absolución en favor de una persona condenada por terrorismo. Así no es. 

Escribo esto para dar mi apoyo total a las familias de los comandos, para protestar en contra de los abusos a los que estuvimos sometidos durante las épocas del terrorismo, para decir que no hay justificación para que esos terroristas hayan hecho lo que hicieron, y para poner mi granito de arena para que en la memoria de ustedes no quede duda que esto es algo que nunca más debe repetirse. 

¿Hace algunos años hubiera sido un soplón?¿Hace unos años hubiera sido parte de un aniquilamiento selectivo por escribir esto? Qué increíble, 20 a 25 años después, aun tengo a flor de piel ese sentimiento, aun tengo reparos en hablar de este tema  tan abiertamente (pero no tengo miedo a expresarlo), eso fue lo que nos sembraron, eso fue lo que vivimos, no lo permitamos nunca más. 

#TerrorismoNuncaMás


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Notas: 
  • Lamentablemente al dirigirme al cementerio -el día de hoy- ya no fue posible encontrar los nichos pintados con la hoz y el martillo, me cuando el terrorismo se debilitó los pintaron con palomas y de blanco, pero que desde hace muy poco vienen siendo pintados de rojo, tal como muestran las fotos. Me comentaron además que la Fiscalía enviaba todos los meses una notificación al cementerio mediante la cual los obligaba a mantener con cuidados extremos dichos nichos. 
  • Las fotos del cementerio fueron tomadas el día 07 de enero del 2012.
  • Agradezco a esa gran amiga que sembró en mi el interés de escribir sobre este tema y cuya información fue muy valiosa para el desarrollo de este post. 
  • Agradezco los reportajes del programa Rey con Barba en relación al terrorismo, pues brinda un excelente manera de recordar los pésimos momentos que nos hicieron vivir los terroristas. Asimismo agradezco la información que llego  indirectamente desde su producción a mis manos.  







8 comentarios:

  1. tengo 40 años. Soy de clase media, no sufrí a Sendero como cientos de miles de peruanos. Pero todos, digo, todos, teníamos miedo: a un auto abandonado con el capot humeante; al retumbe y temblor de suelo q anunciaba un coche bomba; a q no te toque a ti ese día recibir una bala o convertirte en pedazos de carne y tripas pegadas en una pared. Pedro Cama, periodista.

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  2. Lucho, la lectura de tu artículo ha generado en mi dos grandes sentimientos: La pena inmensa por el recuerdo de los terribles días que vivió nuestra patria a causa del terror y, la indignación por el uso sesgado de los recursos que la ley y los tratados pone a disposición de ciertas instancias... El olvido y la ignorancia son los más terribles cómplices de la injusticia, por eso tu aporte es invalorable.. gracias por dedicar parte de tu tiempo y conocimiento en esta tarea de compartir y hacer conocer.. Gracias por no permitir que olvidemos.. Gracias por ayudarnos a comprender e impulsarnos a actuar.. El dolor de tu infancia ha fructificado en amor hacia tu prójimo y hacia el Perú.. Gracias!

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  3. Lucho, despues de lo escrito por ELIZATELSA es dificil agregar algo. Los peruanos, los que queremos a nuestro Peru no olvidaremos nimperdonaremos a quienes asesinaban a mansalva para imponer ideas o filosofia, pero lo mas curioso es que las famosas enseñanzas de Sendero Luminoso no tenian ni pies ni cabeza, mataban por matar, por odio a quien podia surgir, enemigos de la prosperidad. Tan pobres de alma son que los asesinados, en su mayoria, fue gente que no tenia nada, excepto la ilusion de prosperar algun dia. Sigue escribiendo, lo haces super bien y te felicito en forma especial pues cuentas de tu humilde origen y hoy eres un letrado. Mis respetos señor!

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  4. Gran artículo Lucho, me has traido el recuerdo de mis dias escolares. Yo estudiaba en un colegio de Policias donde los padres de mis compañeros fueron destacados a zonas de emergencia. Muchos no regresaron y los que regresaban eran buscados por comandos de aniquilamiento aqui en Lima y ajusticiados. Nosotros mismos como escolares eramos considerados blancos de posibles ataques por los cual teniamos que reportar cualquier sospechoso en las inmediaciones. Esa era la vida que viviamos durante la epoca del terrorismo y me indigna que se trate a los que perpertraron esas acciones como victimas cuando ellos NO tuvieron el mismo respeto con padres y madres de familia a quienes asesinaron a mansalva.

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  5. Que dura y dolorosa puede ser la realidad y que frustración el ver que hay organizaciones como la CIDH o muchas ONGS no entienden al ver el peligro que es para el Perú el que se instale un estado totalitario al estilo maoismo como el de Korea del Norte. El senderismo fue nefasto para el Perú y lo seguirá siendo y tenemos que tener la voluntad y resolución de volver a extirparlo las veces que sea necesario SI LAS VECES QUE SEA NECESARIO.

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  6. Pero ellos justifican diciendo que se defendian del Estado osea segun ellos el Estado nunca debio defenderse de ellos que empezaron todo. Y como con los comunistas no se puede razonar, entonces sera la pregunta de siempre QUIEN FUE PRIMERO LA GALLINA O EL HUEVO!! Simple y llanamente no debemos dejar que nuestros hijos no sepan la realidad debemos contarles las cosas no al olvido porque luego ellos les cuentan pajaritos.

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  7. Excelentes artículos, felicitaciones. ¿En qué cementerio están sepultados los restos de tu padre? Mil gracias por la información. Soy periodista y me gustaría conocerlo para ver los nichos pintados de rojo, y también ver los oficios de los fiscales ordenando que esos nichos no sean tocados por nadie.

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  8. interesante, pero quisiera saber donde esta ubicado este cementerio de nichos rojos para saber si aun están pintados.

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